LA MISION DE LOS 72 DISCIPULOS

 

LA MISION DE LOS 72 DISCIPULOS

Las últimas palabras de Jesús a sus discípulos fueron muy claras: ¡Vayan y hagan discípulos a todas las naciones! Nuestro Señor Jesucristo les deja muy claro que la tarea aún no se había terminado, ¡la obra debía continuar y aún había mucho trabajo! Él les asegura que toda autoridad ya les había sido dada, todo lo que ellos tenían que hacer era: “Ir y discipular.” La esfera de la misión era el mundo entero, como nos repite Marcos 16:15–16, “Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado.”

La iglesia primitiva del libro de Los Hechos tomo en serio esta misión. Los primeros cristianos no vacilaron con la misión que Jesús les había dado a ellos. Al contrario, con gran fuerza e ímpetu predicaron el evangelio por todas las ciudades. Se movieron con la gran misión y se enfocaron en la tarea. En Hechos 5:42 nos dice: “Y todos los días, en el templo y por las casas, no cesaban de enseñar y predicar a Jesucristo.” Los discípulos diariamente y en todo tiempo se encontraban envueltos en la misión de ir y hacer discípulos, de enseñar y predicar la Palabra con la autoridad que Jesús les había dado.

Hoy nosotros debemos enfocarnos en una cosa, ¡hacer discípulos! Esto es lo que nos falta para ver la multiplicación que el Espíritu Santo desea traer a nuestra iglesia. Es tiempo de poner en acción la misión que Jesús nos ha dejado

. Recordemos lo que 2ª Timoteo 2:15 nos dice: “Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad.” En esta mañana necesitamos ser obreros bien enfocados, preparados y dispuestos a discipular. Para esto es que el Espíritu Santo nos ha ungido: Para levantar discípulos que se multipliquen.

¿Cuántos hay acostados esperando? El Señor quiere que levantemos a los dormidos para ser levantados por el Espíritu Santo, pero para ello el mismo Espíritu nos envía a ser discípulos misioneros.

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