La sencillez, el camino de los pobres de Yahvé
La
sencillez, el camino de los pobres de Yahvé
Ser uno en Jesús pobre y
sencillo, al estilo de Francisco de Asís. A la cual él llama a la pobreza una
“dama” porque? Porque la pobreza antes de Cristo era una lacra, pero el Hijo de
Dios se casó con la pobreza porque era una dama. Damas o señoras son las que andan con lujosos vestidos y joyas,
poro hay una mayor belleza en una mujer sencilla, que sabe
ser elegante de una manera de maquillarse, etc. Incluso en la belleza de un
hombre, la sencillez es un Don, solo hay que ver la vida de San José un hombre
sencillo, en María una mujer de pueblo que tenía la elegancia y rebosaba de
ternura y bondad.
Los Hombres y Mujeres de Dios
son sencillos, pueden generar riquezas pero no lo hacen para ellos, sino que la
comparten. San Francisco decía: “Ya no necesito más” él que había sido
guerrero, había luchado en las cruzadas, sus padres eran de buena posición,
tenía poder e influencia en la sociedad de su tiempo. Dijo: Ya no necesito más, conozco a Cristo pobre
y crucificado” y esta era la meta que se marcó para seguir a Jesús. Porque no
es pobreza por pobreza, sino ser pobre por Cristo. Es como la Cruz, eso es un
suplico buscar solo el sufrimiento, pero abrazarte a la Cruz de Cristo es
diferente, no es cualquier cruz. Cristo se hizo pobre para enriquecernos con su
pobreza, y así lo han entendido los Santos y Santas de Dios.
Dios siendo el Todopoderoso,
se hizo pobre, asumiendo nuestra
debilidad. ¿Qué sentido tendrá para nosotros? Pues que El marco un camino, la
sencillez, la pobreza, algo difícil de entender para muchos que siendo ricos
quieren abrazar la pobreza del evangelio y seguir en sus riquezas. Para este
camino hay que abrazar muy fuerte a esa dama (como la llamaría Francisco) con
mucho amor y desprendimiento. Así lo hicieron muchos al igual que Francisco,
solo se trata de cambiar el chip y las cosas empiezan a ser diferentes, porque
marcando la diferencia se logra enamorarse con la Dama.
Ojea el evangelio y verás la
vida de los apóstoles, los primeros cristianos, etc. ¿Cómo eran sus vidas? No es que los ricos no puedan salvarse, claro
que sí, pero el seguimiento, el camino para agradar a Dios es la vida
sencilla. No afanarse en buscar títulos, honores, etc. Si estos vinieren, que vengan por el camino andado, pero no por
buscarlos. ¡Ya ves! La cosa más simple es la más difícil… Jesús nos dice; Si fuerais del mundo, el mundo ama lo suyo; pero como no sois del
mundo, sino que yo os escogí de entre el mundo, por eso el mundo os odia.
Jn 15-19 Pues porque hay una diferencia, no es lo mismo “ser del mundo” que
“estar en el mundo”. ¿Ves la diferencia?
Por esta razón debemos de
pedir al Señor que nos quite todo lo que nos separa de Él, y rogarle que nos dé,
todo lo que nos une a él. Que nos libere del
“egoísmo” y nos conduzca hacía El. Buscando siempre su divina Voluntad en todo.
Porque el Amor exige el máximo, ¿Cómo podríamos vivir así? Pues
cada día le pedimos a Dios la fuerza para vivir con Él y en Él. Solo así
venceremos al mundo. Porque sin Dios,
somos demasiado pobres para ayudar a los pobres. No se puede servir a
los pobres, sin ser almas de oración, porque solo en la intimidad de Dios está
la verdadera caridad.
El penitente de Asís así lo
entendió, lo primero es el trato intimo con Dios, (la oración) y después servir
en Dios a los hermanos, sino es así convertimos la caridad en una obra
asistencial (ONG) y pierde el valor
sobrenatural. Tampoco podemos caer en un espiritualismo puritano, en un
liturgismo en rezos, ni en un socialismo religioso, lo que se necesita es ser
almas eucarísticas y de profunda oración,
a solas en silencio ante aquel que
sabemos que nos ama. Porque sin Dios somos demasiado pobres, para ayudar a los
pobres.
Francisco, abrió su casa como
la casa de Nazaret, acogiendo al hermano
como si del Señor se tratara,
sirviéndole y curando sus heridas por el Amor del amado. Y el Señor nos
dará hermanos si como tales nos amamos.
Rafael Verger
És una meravella aquesta reflexió sobre Francesc d'Assís, que ens falta per arribar a la seva altura.
ResponderEliminarJoan Cotura
Barcelona
Vivir el carisma de Francisco es, entre otras cosas más, salir de la media en un mundo que relativiza los valores del Reino que Dios nos ha pedido construir. En el carisma franciscano, ser fieles adquiere un sentido muy real: Somos fieles y no podemos andar con coquetos con nadie, ni en ninguna otra parte, ni con nada que no sea Cristo en su Iglesia, y desde esta doctrina, firmeza e identidad, abiertos en caridad y diálogo con las demás religiones y formas de pensamiento.
ResponderEliminarSer fieles a la Iglesia como lo fue San Francisco. Amar a la gran familia histórica que Jesucristo fundó. Es verdad que San Francisco es muy admirado fuera del mundo eclesial y cristiano, y eso es muy bueno, pero el carisma franciscana como tal no puede entenderse ni asumirse en su totalidad fuera de la vida de la Iglesia católica.
Me alegro mucho de encontrar hermanos en todas partes del mundo y sobre todo en España, yo también soy franciscano OFS.
Saludos y Paz y Bien
Ignacio Gómez
Argentina